sábado, 28 de enero de 2012

Hay cosas que, por desgracia, no pueden volver.

+3, Ya son tres meses desde que te fuiste para siempre y aún te sigo sintiendo, ¿cómo es posible? Te extraño. Te echo de menos. Ojalá estuvieras aquí, tengo tantas cosas que contarte que no sé si empezar por el principio o por el final. Todo lo bueno, tarde o temprano se acaba, pero en este caso fue demasiado temprano... Han pasado muchas cosas en tu ausencia... Quisiera que podrías verlas desde donde estés. Pero... Me temo que eso es imposible. Tengo miedo. ¿Sabes por qué? ¿Sabes de qué? De que estoy comenzando a olvidar cosas. A olvidar como era tu risa o tu llanto. Tus miradas, tus sonrisas. No quiero olvidarte. Quiero tenerte siempre presente cariño y eso me jode. Puede que parezca que estoy bien, que estoy feliz, pero eso solamente es una máscara. Cada mes se repite. Me dijeron que el dolor cesaría, pero yo no veo resultados. No consigo sacarte de mi mente, ya que siempre estás presente. Dicen que el primer amor nunca se olvida, de momento, estoy de acuerdo con ese dicho... No tengo ganas de nada, tan solo de abrazarte y eso es completamente imposible. Quiero tenerte enfrente de mí, decirte que te amo, que no me sueltes nunca. Como el último día que estuvimos juntos. Tus últimas palabras: ''Para siempre.'' esas, esas no se me olvidarán. Sé que debo olvidar, sé que debo dejar el pasado atrás y no llorar. Pero, técnicamente tú eras mi vida, y una vida, siempre se recuerda.

viernes, 20 de enero de 2012

Quiero sentirte.

Vamos. Acércate. Pégate a mí. Muy bien. Sigue así. Sin miedo. Quiero sentirte cerca de mí. Echar a volar mi imaginación. Cerrar mis ojos y notar un estallido de sensaciones en mi cuerpo. Bésame. Quita el miedo. Ven, yo te enseño. Niño grande, yo te explico como es el juego. Tú me quieres y yo te hago feliz. Agárrame y no me sueltes. Acaríciame. Mi piel se pone de gallina. Me gusta esta sensación. No pares de hacerlo. Pégate más. Quiero más. Mi amor, no tengas miedo. Ven aquí, que yo sé cómo alejarte de ello. No hace falta bebida ni drogas ni dinero. Sólo te necesito a ti. Agarra mi mano. Vamos a saltar un precipicio juntos. Saldremos vivos. Caeremos de pie, al igual que dos gatos enamorados. Yo voy, ¿me sigues? Abrázame. Siénteme como te siento yo a ti. Una última cosa. No me sueltes nunca.

jueves, 19 de enero de 2012

Esos pequeños detalles. . .

¿Alguna vez te has sentido por los suelos? Sentir que no le importas a nadie. Que estás sola. Que nadie te quiere. Incluso que nadie te necesita y que no sirves para nada. ¿Verdad que alguna vez sentiste todo esto y más? Y que de repente llega ese mensaje. Ese mensaje de un amigo que no le conoces en persona porque vive a muchos kilómetros de ti. Que te pide que se lo cuentes. Le cuentas lo que te pasa. Que te sientes como una mierda. Que te sientes gilipollas. Él. Él consigue sacarte el ánimo a florecer. Porque te hizo ver que eres única y especial y que vales mucho. Te dice un millón de veces que aunque haya distancia que siempre seréis amigos. Y que por encima de todo, nunca te olvides de lo que te ha dicho ese amigo. Tú eres única, especial y vales mucho.

domingo, 15 de enero de 2012

No quiero crecer.

No quiero hacerme mayor. Quiero ser la hermana de Peter Pan. Nunca crecer. Hacerse mayor es una mierda y todos lo sabemos. Las cosas cambian. Llega el instituto. Los problemas y el amor. El puto amor. Que siempre toca pasarlo mal porque si es correspondido es casi un milagro. Después de todo... Estoy segura. Crecer es una mierda.

sábado, 14 de enero de 2012

Olvida el pasado, vive el presente.

Pasaron los meses, pasaron los días, la angustia que había en mí no se iba, no se largaba. No podía librarme de aquella amargura que asolaba mi alma por mucho que quisiera… Era todo un auténtico caos. Vagaba sin rumbo en el camino de la vida, puede que incluso pensara en dejar de recorrer ese camino y meterme en otros. No soportaba el saber que tú ya no estabas a mi lado, lo reconozco. Nunca llevé bien la traición a la que me vi sometida. Traicionaste mis sueños, mis ilusiones, mi felicidad, mi vida… No pude llevarlo bien jamás. No podía creer lo que me había pasado. Lo que yo creía para siempre, resultó ser un momento fugaz. No podía asimilarlo. Lo admito, no se me da bien soportar este tipo de cosas. Me sentí utilizada, pensé que nunca me quisiste realmente, que solo fui una imbécil a la que tomaste el pelo bien tomado. Me hiciste formar parte de un juego en el que yo no fui más que una simple peón. Tiraste los dados y me moviste a tu antojo por el tablero. Pero, llegó el momento que te cansaste. Arrojaste esos dados casi sin ganas y dio un número. Uno nefasto. Moviste ficha y caíste en una casilla. “Fin del juego”. Todo se acabó a partir de ahí. Te habías cansado de jugar, y encima el destino te había echado para atrás para que volvieras a comenzar. Pero fuiste un cobarde y no quisiste empezar de nuevo. Abandonaste el juego en el trastero, a esa peón… Y ella no supo seguir el juego que tú empezaste. La partida se acabó y aquella peón idiota quedó perdida por toda la eternidad. Se encontraba a oscuras, una oscuridad infinita de la que poca gente ha podido salir en la historia. Avanzaba a ciegas, dándose golpes con todo obstáculo que había, mas le daba igual. En parte, quería hacerse daño, quería sentir dolor y olvidar el que ya sentía. Lógicamente eso era remotamente imposible. No hay mayor dolor. Aunque, siempre detrás de la oscuridad, se sucede la luz. Y esa peón la encontró y dejó de ser una simple ficha, para ser al fin persona de nuevo. Con esto logrado, quizá lo más difícil, quedaba por superar lo demás. Debía olvidar que él jugó con ella. ¿Cómo se consigue eso? No lo puedo decir a ciencia cierta, pero se puede lograr. Nada es imposible en esta vida. Pueden venirte bajones que te hagan dudar, pero si tienes una mente fuerte, a todo puedes mirar de frente y ganar tu batalla personal. Es tu vida, y de nadie más. Seguirán llegando vientos helados, y algunos te cogerán sin abrigo probablemente, pero da igual, el fuego interno que desprende tu corazón no se puede apagar. Así que, ¿por qué sufrir por el pasado? Haz frente al dolor, supéralo, sé fuerte y ganarás un valioso regalo, tu felicidad…

jueves, 12 de enero de 2012

Van pasando los días y las cosas siguen igual.

Seguimos igual. Van pasando los días y no cambiamos nada. Incluso te llamo para intentar arreglarlo pero tú te limitas a no cogerme el teléfono o a no contestarme a los sms. Estoy rayada. Me siento sola y perdida. Sencillamente estoy mal. Parece que a ti te da igual. ¿Enserio te doy igual? Nunca llegué a pensarlo. ¿Ves? Me hago películas en la cabeza yo sola, sin saber si son verdad o son mentira. Ya no sé que pensar. Tu reacción no es normal. Sólo quiero arreglarlo todo. Dejar el pasado donde está y vivir el presente. Pero no me parece tan fácil. Sólo te pido una cosa por favor... Escúchame.

martes, 10 de enero de 2012

Al contrario. . . Tú eres la razón por la cual yo sonrío. . .

Celos, celos y más celos. Estoy harta de los celos la verdad. Me gustan los chicos que son un poco celosos porque... No sé... A veces te hacen sentir querida con esos síntomas pero... Siento decirlo así pero lo tuyo es un caso algo exagerado... Si fuera por ti, no quedaría con mis amigos chicos. Sólo podría hablar con las chicas en clase... Todo esto me agobia, me hace sentir... No sé explicártelo... Siento como si desconfiaras de mí. Como si pensaras que en cuanto te des la vuelta me iré con otro. Pero sabes que en el fondo no es así. Y que yo no te haría eso nunca. Así que quiero que sepas que conseguiré de una manera u otra que esto funcione, que todo salga bien. Aunque lo tenga que hacer yo sola... Pero tú y yo vamos a pasarlo. Vamos a pasar toda esta mierda que nos viene encima como si sería un simple bache. Los dos juntos. Olvidándonos de los complejos y los problemas. Solos tú y yo.

domingo, 8 de enero de 2012

Dame una razón por la que sonreír. . . Tú.

No puedo más. No soporto este malentendido. No fue culpa mía que tú vieras eso. Aunque a pesar de todo, si te pareció lo que no era, te pido perdón. No quiero que estés enfadado conmigo. Ya que sin ti, sí que no me quedan motivos para ser feliz. Bastante tengo con que mis amigos están a tomar por culo y jamás los vi en persona, a parte de que mi mejor amigo que sí está en el pueblo ya no es como antes porque está celoso de ti. Lo de anoche fue algo horrible en comparación de lo que yo quería. La fiesta de mi cumpleaños se convirtió en una pelea. Ahora, tú estás en el hospital por eso que sucedió. No sé si te conseguirás poner bien joder. Estoy preocupada. Harta de todo. ¿Es que no merecemos ser felices de una vez? Te lo quise explicar pero tú te marchaste sin decir nada, aunque con esa mirada me lo dijiste todo. No te vayas. No me dejes. Sin ti, ya no hago nada. Tú me salvaste la vida, por eso sigo aquí. Tú fuiste también el que siempre estuvo a mi lado pasara lo que pasase y me juraste estar siempre en ese lugar. No quiero que cambie nada por favor... No cambies tú.

Quiero volver atrás en el tiempo.

Sí, quiero hacerlo y no quiero esperar más. Chicas, ¿se puede saber qué nos ha pasado?. Éramos inseparables. Estábamos todo el día juntas. Las 6. Ahora estamos tres por un lado y tres por el otro. Si os paráis a pensarlo un momento os daréis cuenta de que nos enfadamos por una gilipollez. Bueno, os enfadasteis vosotras conmigo...
Yo solamente dije lo que pensaba, ¿acaso ahora no puedo?. Pero aquí no tengo que hablar de mi libertad de expresión sino de que os echo de menos demasiado. Os contaba TODO y siempre me ayudabais como yo hacía con vosotras. Ahora... Estoy con ellas dos pero... Es como si estaría sola. Digamos, que me fui al lado malo del grupo. No sé si os dais cuenta o no pero estoy entrando cada vez más hondo en una puta depresión y no hay nadie ahí afuera que consiga darme la mano para salir de ese pozo húmedo en el que me caí. Solamente gente que no conozco en persona. Esa gente es la que me entiende. Quiero tener un botón ''reset'' que me lleve atrás en el tiempo y me permita pensar mejor mis actos pero... Joder. Soy humana. Todo el mundo tiene errores. Yo os perdoné los vuestros cientos de veces. Pero claro, yo soy yo, y de buena fui tonta. Sólo quiero que sepáis que no sabéis lo que estáis haciendo... Que luego os quedáis solas y venís corriendo donde mí y entonces seré yo quien os mande a la mierda por mucho que me duela... En fin. Seguiré desahogándome, expresando como me siento en Internet, ya que ahí es donde está la gente a la que le importo aunque sea un poco.

Sí, soy un bicho raro y estoy orgullosa de ello.

Deseo salir de aquí. Quiero que termine todo esto. ¿Y la vida es un regalo? ¡Los cojones! No paras de sufrir. Tienes dos momentos bonitos de cada cien que querrías borrar de tu mente. Aunque eso probablemente sea en mi vida porque como todos decís... ¡Yo soy un bicho raro! ¿Que por qué lo soy? Bien, pues según vosotros lo soy porque sigo enamorada de la persona que estuvo a mi lado desde los tres años. Que luché por esa persona y la conseguí, y ahora no está y por desgracia, jamás va a volver y jamás le volveré a ver. Aparte, también soy un bicho raro por no querer liarme con otros chicos cada noche, liarme con tres en la misma noche o uno cada dos días. ''Pero es lo que se lleva.'' me decís... Pues siento deciros que yo no sigo modas, que me importa una mierda lo que pase a mi alrededor, porque yo tengo vida propia y estilo propio y no necesito estar copiando a la demás gente porque no sé qué hacer conmigo misma. O sea, que a vosotras, os gusta que un tío os manosee enteras, de arriba a abajo, que le dejéis hacer lo que él quiera con vuestro cuerpo. Un tío que no conocéis. Y que al día siguiente os le encontréis con sus amigos y que ni te mire y les diga a sus amigos que le das asco. ¿Eso os gusta? ¿Enserio? Lo que más me jode es que si no lo haces... Vas a ser una monja para toda tu vida, ¿no? Mira... Ya estoy harta de esa clase de gente... Parecéis locas desesperadas. Os tratan como a putones. No, si al final será cierto que hay más guarras sueltas que inmigrantes en España. Os reís de mí porque yo no hago esas cosas y porque sigo enamorada. ''Si está muerto, ¿por qué sigues pensando en él?'' me decís mientras os descojonais. Y yo, ya estoy cansada de deciros que si lo recuerdo, es porque yo le quise, y porque supe el significado de AMAR y de que TE IMPORTE ALGUIEN. Y sencillamente... Porque recordarle a él, a su sonrisa, es lo que me mantiene aquí. Es recordar la parte buena de mi vida.

No intentes cambiar a esa persona, tan solo... Haz que sea perfecta para ti.

Bob Marley dijo: ''Puedes no ser su primero, su último o su único. Ella amó antes y puede amar de nuevo. Pero si ella te ama ahora, ¿Qué otra cosa importa? Ella no es perfecta, tú tampoco lo eres, y ustedes dos nunca serán perfectos. Pero si ella puede hacerte reír al menos una vez, te hace pensar dos veces, si admite ser humana y cometer errores, no la dejes ir y dale lo mejor de ti. Ella no va a recitarte poesía, no está pensando en ti en todo momento, pero te dará una parte de ella que sabe que podrías romper, su corazón.. No la lastimes, no la cambies, y no esperes de ella más de lo que puede darte. No analices. Sonríe cuando te haga feliz, grita cuando te haga enojar y extráñala cuando no esté. Ama con todo tu ser cuando recibas su amor. Porque no existen las chicas perfectas, pero siempre habrá una chica que es perfecta para ti.''

Aprende a ser fuerte. No te rindas jamás.

Todo comenzó un quince de septiembre del año dos mil. Yo tenía tres años y tú cinco. Era la fiesta del cumpleaños de tu tío. No se cumplen treinta y cinco años todos los días. Mis padres estaban invitados. Por eso. Gracias a esa fiesta, yo te conocí. Éramos muy sociables, nos hicimos amigos al instante. Desde aquel día, nuestros padres nos llevaban al parque a jugar siempre. Me defendías de aquellos niños que se metían conmigo. Estabas siempre conmigo. Como si fuéramos hermanos. Con el paso de los años todo seguía igual. Yo empecé a sentir algo más que amistad por ti... Mi sueño se hizo realidad... Tras esperar dos años para decírtelo, me besaste. El veintiocho de octubre de dos mil nueve, comenzó nuestra historia. Hubo muchos enfados, muchos piques... Pero en realidad, sólo hay dos momentos que me gustaría borrar de mi mente. El resto los grabaría en un disco y yo lo rayaría a propósito para volver a verlo una y otra vez. Tú eras diferente al resto. Eras una persona de las que ya no quedan. Un chico de los que se fijan en el interior de las personas y el físico les importa una mierda. Eso, junto a como me tratabas, me hacías sentir especial. Única y afortunada por tenerte a mi lado. Aún sigo sin creerme que pudieras estar conmigo. Con la chica a la que todo el mundo rechazaba porque es fea. Me hiciste sentir bien.
En agosto de dos mil diez, un chico me acosaba. Confié en ti y te lo conté, como hacía con todo. Ese mismo día en que te lo dije, nos le encontramos y les dijiste que me dejaran en paz. A los dos días, el dieciocho de agosto, te vieron solo por la calle y te atacaron por detrás. Cuatro navajazos en la espalda y cinco puntos de brecha en la frente. No había nadie en la calle. Pues era la fiesta del pueblo y todos estaban en la plaza. Tú estabas inconsciente. Desangrándote. Un señor te vio y te llevó al hospital. Allí quedaste ingresado. Yo me enteré y fui corriendo a verte. Estabas muy mal, muy débil.
La idea de que quizás no volverías a despertar me aterrorizaba. Pero lo hiciste. Fuiste fuerte y lo superaste. Pensamos que todo ese problema ya terminó, pero nos dimos cuenta de que no podías caminar. Tu sueño era jugar al fútbol. El sueño de tu vida, que siempre lo fue. El médico dijo que era un tumor de columna provocado por uno de los navajazos. Te alcanzó la médula. Sólo sobrevivirías si alguien donaba y se quedaba en silla de ruedas. Me hice las pruebas y era compatible contigo. Tú me lo impediste. ''Lo último que quiero es joderte la vida.'' me dijiste. El señor que te llevó al hospital se ofreció a donar, ya que él tenía otro cáncer que ya no tenía solución. El señor murió y los médicos hicieron el transplante. ¿Todo bien? ¿Adiós miedo? ¿Adiós preocupaciones? Ojalá. Tu cuerpo rechazó a los dos meses ese transplante. Resulta que el cáncer de ese señor, se hallaba oculto ahí. Ahora lo tenías tú. No había nada que hacer, dijeron los médicos. ''¡Dadle la quimioterapia o algo!'' les grité yo. Pero ellos contestaron que ese proceso no alargaría nada más que el sufrimiento. Lo dejaron estar. Estuviste muchísimo tiempo malo. Me dijeron las fases del cáncer... Primero, te fallarían las piernas. Luego vendrían los mareos. Después, la tos con sangre, y a continuación había que ingresar de inmediato. A lo largo del tiempo, esas fases se fueron haciendo realidad. Las piernas te fallaron en el entrenamiento. Los mareos te daban al andar. Y finalmente, en el cine, tosiste sangre... Te llevé al hospital. Decidieron ingresarte de inmediato. ''No te vayas, quédate'' me pediste. Yo lo hice. Me quedé contigo cada día, cuando podía... El veintiocho de octubre de dos mil once. Nuestro aniversario. Yo estaba haciendo un examen de biología. Era tercera hora. Me sonó el móvil. Pedí permiso para ir al baño y contesté. Era tu hermano muy asustado, decía que tenía que ir de inmediato al hospital. Fui dejando el examen en la mesa. Allí, te vi inmóvil en la cama.Me acerqué llorando y me senté a tu lado. ''Tranquilo cariño, estoy aquí, contigo.'' te dije en un susurro. Tú, con un hilo de voz, casi no podías hablar, me pediste que me acercara más, que no me veías ni me oías bien. Yo lo hice y me agarraste de la mano. ''Mi niña, prométeme que no vas a llorar. Que vas a ser fuerte y que vas a salir de esto. Nunca vas a estar sola. Te lo prometo. Ahora, prométeme que vas a ser feliz aunque yo no esté a tu lado.'' me dijiste susurrando y llorando. ''Te lo prometo. No me dejes...'' te contesté. ''Lo siento cielo, estoy muy cansado... No puedo más...'' me dijiste. ''¡Abre los ojos por favor!'' grité llorando. ''Adiós mi vida... Recuerda... Sé feliz sin mí... Tú siempre serás mi princesa... Feliz aniversario cariño.. Te amo.'' me susurraste. En ese momento. La maquina que controla tus latidos se acelera, hasta que se queda en un único sonido y una raya. Tu mano deja de agarrar a la mía. Habías muerto. Yo cogí tu cuerpo y lo abracé contra el mío. Me sacaron de la habitación... El día en el que hacíamos dos años... Me dejaste para siempre... Cariño, perdóname, pero soy incapaz de cumplir la promesa que te hice... Faltan dos días para que se cumplan dos meses de tu ausencia. Y el dolor cada día es más y más fuerte...
Te echo de menos cariño... Te amo.

Un año tras otro la misma historia...

Hoy es un día especial. Cumples quince años. estás en una edad en la que vas a experimentar cambios. Emociones nuevas. Vas a reír. Pero también vas a llorar... En esta etapa de tu vida va a ser en la que te formes como la persona que quieres ser en el futuro. Tienes el tuenti, facebook, twitter... Lleno de felicitaciones de tus amigos. Pero tú no te fijas en esas. Tú estás pasando las páginas para ver donde está una en concreto. Sí. Él no te ha felicitado. Aunque no hayas mirado ya tres veces, vuelves a hacerlo más despacio por si te le saltaste. Sigue sin estar. ¿Qué le cuesta poner un simple: ''felicidades'' así soso para alegrarte el día? Parece que mucho. Entras en su tuenti, miras su perfil. Última visita hace cinco minutos. En su tablón ves que le ha hecho una entrada a esa chica que tanto odias, pues ella fue quien te le quitó. La entrada era enorme y se titula: ''Quince años tiene mi amor''. Miras la hora. La hizo a las doce. ¿Tiene tiempo para hacer una puta entrada enorme llena de fotos y vídeos y no es capaz de poner un simple ''felicidades''?. Te pones triste. Sabes que debes pasar del tema pero no puedes, tú le quieres. Es tu cumpleaños. En el suyo le escribiste un comentario que sobrepasaba las siete líneas pero eso no importa. Sólo quieres que él te felicite. Pero sabes que hay otra. Que es el cumpleaños de la otra que para él es más importante que tú. Se te baja el ánimo a los pies. Sales a dar una vuelta con tus amigos y al volver, ¿qué es lo primero que haces?. Volver a buscar su comentario en tu tablón pero no lo encuentras, y ves que tiene muchos con esa otra chica felicitándola una y otra vez. Finalmente, te desconectas ya harta de celos. Aunque sigues con esa poquita esperanza que te queda en el fondo, de que te ponga el comentario... O... ¿Me equivoco?

No pierdas otra oportunidad.

Comienza un año nuevo lleno de ilusión, amistad, amor, aunque también habrá desamor, enfados, caricias, besos, abrazos, insultos, risas, lloros, peleas, reconciliaciones... Un año lleno de todas esas cosas. Pero también sabemos que habrá tristeza. Sueños rotos. Esperanzas esfumadas... Pero este año es un buen momento en el que deberíamos de dejar todo el pasado atrás. Vivir el presente sin mirar al futuro. Perder los miedos. Darnos cuenta de que tenemos otra oportunidad más para sonreír, para cumplir nuestros sueños. Así que dime, ¿eres tú una de esas personas que va a cumplir todo lo que dije? Puede que el dos mil once fuera tu año, o el de él, o el de ella, pero este puede ser mejor o peor, sólo depende de ciertas decisiones que llegará un momento en las que habrá que tomarlas. Habrá que elegir el camino de la derecha o el de la izquierda cuando no haya más remedio. En el año pasado ganaste cosas, o quizás perdiste a quien más querías. Puedes haber ganado un amor y perder una amistad. O como yo, que a pesar de todo lo que sufrí, encontré a gente que me aceptaba tal y como soy, que estaba a mi lado cuando siempre lo necesité y lo siguen estando. Pero no gente de aquí, que los pueda ver en persona no... Gente que está a tomar por culo se ha preocupado por mí. Hay cosas... Pequeños detalles como un ''sé que no estás bien, ¿qué te ocurre?'' que te pueden alegrar el día más gris que tengas. Este año, será todo mucho mejor, estoy segura. Lo será para ti, para mí, para ellos y para ellas. No desperdicies otro año de tu vida callando lo que sientes, grita si tienes ganas, llora si necesitas hacerlo. No te guardes nada. No merece la pena. La persona que de verdad te quiera, siempre estará a tu lado, pase lo que pase.
¡Feliz año nuevo!